Jara


Jara, tiene menos de un año y es de tamaño mediano, esta preciosa podenca ha sido la última en aparecer abandonada, llevaba varios días merodeando  por el  campo pero era imposible hacerse con ella, el miedo y la desconfianza no la dejaba, hasta que  el hambre y la astucia de un voluntario consiguieron cogerla y ponerla a salvo de los peligros de la calle.

Ahora busca constantemente atenciones y caricias, es una perrita muy cariñosa y juguetona.

En muy poquitos días parece otra, se ha adaptado y recuperado rápidamente, está acogida y lista para la adopción.