Aura estaba acurrucada en una esquina de una calle cualquiera, temblando de frío, empapada, y mirando como sólo ellos saben hacerlo, con el alma y el corazón puro y limpio, a las muchas personas que se cruzaban de un lado para otro, esperando que sólo una de ellas sintiese compasión y ternura y le ayudase a levantarse y salir de esa situación de tristeza abandono y miseria, en la que sin entender como, había llegado.
Lejos de guardar miedo, rencor y odio hacia los humanos, ella solo busca unas manos que la acaricien, le den seguridad y le hagan sentirse la perrita mas afortunada del mundo, Aura es tremendamente cariñosa y buena con todo y todos.
Tiene sobre los 2 años, y físicamente se recupera bien de sus heridas, pero en la visita al veterinario, le han diagnosticado un problema neurológico que le afecta a las patas traseras, ella puede moverse con normalidad, pero se le observa una falta de coordinación en sus movimientos al andar.
Todos necesitan y merecen un hogar, pero Aura si cabe, mucho más. ¿ Quieres dárselo tú?